Los ascensores son un medio de transporte seguro y cómodo, pero para garantizar su correcto funcionamiento y la seguridad de los usuarios, es imprescindible que cumplan con una serie de revisiones e inspecciones obligatorias. En este artículo, te explicamos todo lo que necesitas saber sobre las inspecciones obligatorias de los ascensores por parte de Industria, una normativa clave para propietarios y administradores de edificios, así como para las empresas de mantenimiento de ascensores.
1. ¿Por qué son necesarias las inspecciones de los ascensores?
La seguridad es el principal motivo para realizar inspecciones periódicas a los ascensores. Al ser sistemas complejos con componentes mecánicos y eléctricos que están en uso constante, es fundamental verificar que todo funciona de manera correcta para evitar riesgos de accidentes o averías que puedan poner en peligro a los usuarios. Estas inspecciones son realizadas por organismos de control acreditados, bajo la supervisión del Ministerio de Industria en cada país, para garantizar que se cumplen las normativas vigentes. Normalmente estos organismos de control van acompañados por un técnico de la empresa encargada del mantenimiento del ascensor.
2. ¿Con qué frecuencia se deben realizar las inspecciones?
La periodicidad de las inspecciones obligatorias varía en función del tipo de edificio y del uso del ascensor. En España, por ejemplo, la normativa establece las siguientes frecuencias:
Cada 2 años: En edificios de pública concurrencia, como centros comerciales, hospitales, hoteles o estaciones de transporte.
Cada 4 años: En edificios residenciales con más de 20 viviendas o donde el ascensor tenga más de 4 paradas.
Cada 6 años: En edificios unifamiliares o residenciales con menos de 20 viviendas y menos de 4 paradas.
Es importante cumplir con estos plazos para evitar sanciones y, sobre todo, para garantizar que el ascensor esté en perfectas condiciones de uso.
Además de estas inspecciones periódicas obligatorias, la nueva actualización ITC AEM1 de 2024 añade una inspección obligatoria añadida por cambio de conservador, que se debe realizar antes de cambiar de empresa de mantenimiento en caso de que la comunidad quiera realizar este cambio de contrato.
También existen ciertas situaciones en las que industria requiere la realización de una inspección obligatoria extraordinaria, debido principalmente a fallos o averías continuadas o anomalías en los sistemas de seguridad o funcionamiento del ascensor que así lo recomienden.
3. ¿Quién realiza las inspecciones?
Las inspecciones obligatorias de los ascensores deben ser realizadas por organismos de control autorizados (OCA), que son entidades independientes acreditadas por el Ministerio de Industria. Estos organismos se encargan de revisar que el ascensor cumple con todos los requisitos de seguridad y funcionamiento establecidos por la ley.
Una vez realizada la inspección, el OCA emite un informe de inspección, que puede ser favorable (si todo está en orden) o desfavorable (si se detectan defectos que requieren intervención). Este informe debe ser entregado al propietario o administrador del edificio, y también a las autoridades competentes.
4. ¿Qué se revisa en una inspección obligatoria?
Durante la inspección obligatoria, los técnicos revisan una serie de elementos clave del ascensor para asegurarse de que funcionan correctamente y cumplen con las normativas de seguridad. Algunos de los aspectos que se evalúan incluyen:
Estado de los cables y poleas.
Sistemas de frenado: Verificación de que los frenos de emergencia y de retención funcionan adecuadamente.
Puertas y cerraduras: Asegurar que las puertas se cierran correctamente y que los mecanismos de bloqueo son seguros.
Sistemas de seguridad: Comprobación de dispositivos como los paracaídas y amortiguadores.
Sistemas eléctricos: Inspección de los cuadros eléctricos y los sistemas de iluminación de la cabina.
Nivelación de la cabina: Asegurarse de que el ascensor se detiene al nivel adecuado en cada planta.
Pulsadores y señalización: Comprobar el correcto funcionamiento de los botones de control y las señales visuales y acústicas dentro y fuera del ascensor.
5. ¿Qué ocurre si el ascensor no pasa la inspección?
Si durante la inspección se detectan defectos graves o muy graves, el ascensor no podrá seguir operando hasta que se realicen las reparaciones necesarias. Estos defectos se clasifican en tres categorías:
Defectos leves: No comprometen la seguridad del ascensor. La normativa anterior establecía que estos defectos deberían subsanarse antes de la siguiente inspección obligatoria. Sin embargo, la nueva ITC obliga a que estos defectos se subsanen en un plazo máximo de 6 meses. La corrección de estos defectos debe ser certificada por la empresa conservadora y comunicada al organismo de control.
Defectos graves: Requieren la intervención de un técnico de mantenimiento y deben corregirse en un plazo determinado. El ascensor puede seguir funcionando, pero con limitaciones. En este caso el organismo de control deberá realizar una segunda inspección para comprobar y certificar la corrección de estos defectos.
Defectos muy graves: Implican un riesgo inminente para la seguridad de los usuarios. En este caso, el ascensor queda fuera de servicio hasta que se subsanen los problemas.
Una vez realizadas las reparaciones, es necesario notificar al organismo de control para que realice una nueva inspección y certifique que el ascensor puede volver a operar con normalidad.
La nueva normativa ITC AEM1 de 2024, de reciente entrada en vigor, añade a estos defectos una denominación nueva, ya que la nueva normativa es más restrictiva con los aparatos en materia de seguridad. En este caso la OCA indicará un defecto de adaptación a nueva normativa, que deberá de subsanarse en un plazo máximo de 1 año, plazo que también puede variar en función de la comunidad autónoma.
6. Consecuencias de no cumplir con las inspecciones obligatorias
No realizar las inspecciones obligatorias puede tener graves consecuencias. Por un lado, existen sanciones económicas por incumplir la normativa, que varían según la gravedad de la infracción y la comunidad autónoma. Por otro lado, si ocurre un accidente o avería, el propietario o la comunidad de vecinos puede ser considerada responsable legal por negligencia, lo que puede derivar en problemas legales y económicos.
Además, sin las inspecciones al día, las aseguradoras pueden negarse a cubrir posibles siniestros relacionados con el ascensor, lo que aumenta el riesgo financiero para los propietarios.
7. El papel del mantenimiento regular
Aunque las inspecciones de Industria son obligatorias, es importante recordar que el mantenimiento periódico de tu ascensor es clave para evitar problemas. Contar con un contrato de mantenimiento con una empresa especializada garantiza que el ascensor esté siempre en buenas condiciones y reduce el riesgo de recibir un informe desfavorable durante la inspección oficial.
Las inspecciones obligatorias de los ascensores son esenciales para garantizar la seguridad de todos los usuarios y asegurar el cumplimiento de la normativa vigente. Es fundamental conocer la frecuencia con la que deben realizarse y los aspectos que se revisan, así como la importancia de estar al día con el mantenimiento preventivo. Recuerda que, al final, cumplir con estas normativas no solo evita sanciones, sino que protege a quienes usan el ascensor a diario.
¿Tienes alguna duda sobre la inspección técnica realizada al ascensor de tu comunidad? ¿Has recibido un acta desfavorable de tu ascensor y tienes alguna consulta? Ponte en contacto con nosotros y te asesoramos sin compromiso.
